8760

          Prosáico pero es así, hoy  día 27 de abril de 2011  cuando las manecillas del reloj  confluyan determinando  la hora de las 20:30, 8760 horas, un año, habrán transcurrido desde el  pistoletazo de salida  del V Festival Internacional De Folclore Juvenil  De Queixumes Dos Pinos 2010.

            Para muchos el mejor, para otros un reto que este año seguro íbamos a  superar, pero que   “REALIDAD” y  “… Y  FICCION”  echaron  abajo. “REALIDAD”  porque era un sueño que chocó con la   dura “FICCION”.

            Pero no  hay que desanimarse. Por tierras que me son queridas  y añoradas siempre hay una esperanza: ¡¡¡¡¡ YA FALTA MENOS PARA EL PRÓXIMO!!!!!.

¡¡¡¡ HEEEYYYY CARBALLEEEEIIIIRAA !!!

           El dia se acerca, todos están pendientes para que no falte nada y de nada, los adornos cambian la cara del lugar, encargos de viandas y comida para el día señalado. Todo preparado. ¡A invitar!

            Es el día, lo primero el espíritu, por aquello de cumplir con las creencias y lucir ante  la gente los dineros de las ropas que nos vamos a vestir. La imagen del santo o santa paseada por las calles en volandas y en silencio, cada uno rinde cuentas a su modo. Las campanas repican en la procesión y desde  su  peana  el Patrón o la Patrona mira de reojo a la beata  que a hurtadillas mira pasar el cortejo desde su ventana. Bombas, regocijo, silencio. ¡A rezar!

            En mesas espléndidas con los mejores adornos y superiores   manjares. Llenas  las copas de vino. Rodeado de comensales amigos y  de tus familiares, disfrutando con ellos de la algarabía de la fiesta y de su compañía. Compensando con creces los esfuerzos y trabajos de su  preparación. Satisfecho del resultado.¡A comer!.

           

            Estamos de fiesta, se tiene que notar que es un día grande que tenemos que celebrar. El gentío adquiere un desordenado orden  atávico mientras  el bullicio se adueña de la calle y de la plaza, alguien se atreve a vencer su vergüenza y  su pecho lanza al cielo  una canción que todos acompañan. ¡A cantar!

            No pueden faltar, sin ellos no hay fiesta,con ellos las cosas cambian. Son los cómplices de nuestras esperanzas de estar con la  chica o chico que nos encanta. Los que ponen todas las notas. Los que satisfacen  nuestra alegría. Los que inundan  de armonía el ambiente que nos arropa. Los que más  hacen para mover a la gente. Son los músicos. ¡A bailar!

            Y cuando de todo se ha apoderado la noche y es negro hasta el blanco de los ojos. Y  mouchos, coruxas, sapos e bruxas. Demos, trasnos e dianhos   aparecen en la  Lume das Santas Companhas. Cual chamán de ancestrales ritos  Con este fol levantarei as chamas deste lume que asemella ao do inferno, e fuxiran as bruxas acabalo das sas escobas   y en este estado catártico purificado  por el fuego  E cando este brebaxe baixe polas nosas gorxas, quedaremos libres dos males da nosa ialma e de todo embruxamento. Forzas do ar, terra, mar e lume, a vos fago esta chamada: si e verdade que tendes mais poder que a humana xente, eiqui e agora, facede cos espritos dos amigos que estan fora, participen con nos desta queimada. ¡A beber!

            En el momento mágico en el que entonamos  el himno de nuestros vecinos astures  y la luna, ¿manchada  de blanco?, es nuestra  inseparable amiga e intentamos  imitar lo que nuestros chicos y chicas de Queixumes hacen  en Valdoferreiro nos damos cuenta de que a  lo  que podemos aspirar, como mucho,  es a pasarnos los brazos por los hombros como hacen en Parranda, y con un poco de suerte hasta  damos los primeros pasos en Muiñeira Grande con el “abro cierro un dos tres” (esto me suena ).

            Pero como estamos de fiesta, en “a nosa festa”, disfrutemos de las excelentes diagonales de la Xota de Xosé,  admiremos la fuerza de Valdoferreiro, participemos de la fiesta de Parranda y  observemos  atentamente el buen hacer  de Seara cintas, Paus o Xuvencos.  Con todas  las danzas podemos deleitarnos, todas tienen su alma que las distingue de las demás, que las hace únicas, distintas.

            Sin embargo hay una especial para mi. No es, quizá, la más elegante ni la más brava, pero cuando suenan sus notas y al público se le piden palmas y responde, se crea un universo encantado entre bailarines y espectadores que alcanza su esplendor  máximo en sus característicos remolinos. Tiene un pálpito especial que emociona. Es Areal.

            ¡¡¡¡ Heeeyyyy  carballeeeeiiiiira !!!

...Y FICCIÓN.

            Voy a comenzar donde acabó la “REALIDAD”: “este año no vamos a presumir de ciudad”.  Y no por que no tengamos de qué presumir. No es cierto que  “Ourense tiene tres cosas que no tiene…”. Ourense tiene trescientas de las que poder presumir. Un río que la embellece y le regala unas pozas de agua termal que cuántos quisieran. Un río sin puentes ¿qué es? Los coge un guía turístico y tiene a los turistas toda la mañana explicándoles cada uno. Y el casco viejo y la Plaza Mayor y los parques y  la catedral y las iglesias y el Concello. Y las Burgas, ¡DESDE 1975 DECLARADAS CONJUNTO HISTORICO ARTISTICO! Y esos rincones llenos de historias que la luna se empeñaba en iluminar, y de los que seguro todos tenemos alguno.

            No solamente tenemos cosas materiales para poder  presumir. O ENTROIDO en Ourense y alrededores hay que escribirlo con letras mayúsculas. Os Maios son una de las mejores expresiones culturales de nuestra ciudad. Pocos barrios no celebran sus fiestas…

Mira que no hay  en Ourense cosas de las que estar orgulloso.

Pues de todo esto y más, presumen los componentes de Queixumes cuando han tenido la oportunidad de  llevar el estandarte de Ourense y de Galicia por los más de veinte países que ya han visitado siendo embajadores de nuestra cultura y costumbres.

            Y no me cansaré de repetirlo, pero cuando más que oir, intuyes  el nombre de  Ourense, Galicia,  en las presentaciones de Queixumes en el extranjero cuando van a  salir al escenario, se traga saliva dos veces  y tres si hace falta. Pero de esto SÍ vamos a seguir presumiendo en Queixumes porque el coste económico en un noventa por ciento lo asume cada familia.

            Voy a permitirme una pregunta retórica.¿Cuánto  podría costar una representación institucional durante cuatro o cinco días que son los que dura un festival? , Vaya por dios se me ocurre otra ¿La prensa se haría eco de que tenemos representantes en tal o cual sitio?

            No divaguemos y tampoco seamos pretenciosos Ourense la conoce mucha gente y en muchos sitios y no solo  por Queixumes.

También se conoce,  y cada año más, el festival de folclore que esta agrupación celebra a nivel internacional y el casi tradicional, por las ediciones (la XIII edición el año 2010) de folclore gallego. El internacional porque hay una entidad a nivel europeo  (la IGF) que desde la tercera edición del mismo lo incluyó en sus publicaciones y programas y circuitos de festivales, vamos que hemos aparecido ya tres veces. Y el gallego porque vienen de todas las partes de nuestra comunidad a participar.

Pero este año no va ser así y es una pena. Casi se intuía. El día fuerte del festival se hacía en el Parque Angelita Paradela, en los dos últimos años solamente una representacón de la corporación local se acercó por allí  y los dos años la misma persona. Increíble, cientos de personas viendo el festival y  no aprovechar, sí aprovechar, la oportunidad de dejarse ver por él. Posiblemente Angel tuviera razón: había tanta gente que les daba vergüenza ir.

Lástima que el esfuerzo de estos chavales y chavalas de Queixumes se vea recompensado de esta manera y desde luego, no es ético anunciar a bombo y platillo un acontecimiento institucional y ver a su lado el presupuesto de que disponen, que en ningún momento pongo en duda que no sea necesario, pero tampoco estaría mal acordarse de acontecimientos que en esta ciudad,  de la que seguiremos estando orgullosos, se celebran, y no solo por parte de Queixumes,  pero que cuentan y contamos con cantidades de “farolillo rojo”.

Mira por donde le he cogido cariño a esto de las  preguntas retóricas: después de leer esta entrada y la anterior del blog ¿Qué es  real y qué ficción?

REALIDAD

Erase una vez una ciudad en la que vivía Angel. Era una ciudad en la que  todos los años, cuando la primavera está en su apogeo, se celebraba una fiesta única en la que lo más característico era unas figuras de musgo y plantas que reflejaban escenas del lugar, todos esperaban su llegada.

La fiesta coincidía  con la celebración de un festival popular donde  muchachos y muchachas  procedentes de los más lejanos países y más alejadas regiones mostraban  sus tradiciones, sus bailes, su cultura. Eran embajadores de su país, como lo eran los de esta ciudad  cuando les tocaba a ellos representarla  y convertirse en emisarios de sus raíces, tradiciones y costumbres por medio de la  música y de la danza.

Angel estaba ilusionado con el festival, en el último, él y sus compañeros fueron los que más aplausos recibieron: una ovación atronadora que dejo emocionado a más de uno. Siempre que pasaba por el parque se acordaba de aquel de aquella  tarde.

-Fuimos los mejores…nos lo dijo el profe.

Pudo ser cierto. Pero a Angel, el niño grande de quince años de cuerpo y cinco de mentalidad, no se le olvidó nunca el beso que una  niña de ojos claros y sin luz en su mirada  le dio cuando bajó del escenario.

-Lucía vendrá este año y la llevaremos a las fuentes de agua caliente, y le contaré como es el río desde el barco.  Y nos haremos fotos en el jardín de la fuente principal.

Angel no sabía que ya estaba en medio mundo gracias a las muchas fotos que se hizo el año anterior en desfile de los farolillos,  en el  desfile con traje regional por el centro de la ciudad, en la catedral cuando las ofrendas, en su escalinata, en tantas y tantas que podíamos asegurar que la ciudad de Angel  ya sabían como era en un montón de paises.

-Y este año lo vamos a hacer mejor que el año pasado. Y cuando venga a vernos el que manda en la ciudad se va a quedar … sin saber que decir.

El parque donde  se bailaba estaba lleno de gente. Las sillas todas ocupadas y mucha más de pie.

-…No vino el año pasado a vernos …como había tanta gente, seguro que le daba vergüenza. Pero este año ya verás… ya verás… cuando venga…

-Angel.

-Qué

-Este año no va poder ser.

-¿El qué?

-El festival.

-¿El qué?

-Este año no va a haber festival.

-…¿Por qué?

-No se puede hacer.

-¿Por qué?

-Este año no hay.

            -¿Por qué?

            -Porque no.

            -¿Por qué?

            -¿Por qué?...¿Por qué?... ¿Por qué?...Pues porque de alguna manera hay que crear una ilusión para luego desilusionarte, porque de alguna forma hay que decir que sí para decir luego no, porque es muy fácil crear expectativas y luego dejarte en la estacada, porque no cuesta mucho prometer sabiendo que no vas a dar nada, porque es difícil reconocer que hay otros mejores que tú, por falta de coraje, por envidia, por hipocresía,  porque… por…¡por dios, por dios… por cuatro duros!.

            -¿Y no vendrá Lucía?

            -Este año no, Angel.

            Angel, el niño de la mente de cinco años, se puso a llorar. Sus sueños murieron en un instante  y con los de Angel los de José Antonio, los de Xende, los de Marta. Y los de Mari y los de Clara y María José, los de Laura, los de Andrea. Los de Ana, los de Alba y Carla, los de Rubén y Víctor y Felipe y Mateo. Los sueños de Manuel y Cristian y Ainhoa y Heber  y José y Felipe. Los de Igor, Mauro, Paula, Nuria, Iván. Y los de Uxía y los de Brixit y los de Pedro. Los de Daniel, Bieito, Lucía, Sara, Iria, Nerea, Lúa, Celia, Luís, Almudena. Los de Eva y los de Blanca y los de Tamara...

            -Este año  no vamos a presumir de ciudad.