A
Alex y Carlos, en lucha sin cuartel con el departamento audiovisual
para que todo funcione en su debido espacio y tiempo.
A
Angel y Javier, tres tardes poniendo a los libros entre las cuerdas.
A
Ángeles, la profe, retomando el uso de utensilios que durante años
fueron su oficio. Hay cosas que no se olvidan.
A
Avelino y la furgoneta de Orixe Publicidade, llegando a donde nadie
podía llegar y con objetos más delicados.
A
Chema y Pablo, a los que más paquetes les metieron... en los
furgones de Discomovil Show.
A
Elena, desempolvando y bajando desde el trastero al suelo las
sorpresas del baúl de los recuerdos.
A
José Antonio, pienso que es al único al que no habría que tenerlo
en cuenta porque él es quien nos ha hecho trabajar en fin de
semana.
A
Josefa e Isabel G., asumiendo labores de jefas de vestuario y
complementos, coordinando la lógica logística de los
“burros”...de la ropa, no confundamos.
A
Juan Carlos, resolviendo el sudoku del armario ropero.
A
Julia, de Delatoute, gracias Julia por interpretar a la perfección
el papel que te asignaron, irreconocible el resultado.
A
Leopoldo, le tocó jugar por el pasillo central con el rompecabezas
del bar
A
Lucita e Isabel J., dándolo todo con la fregona y la escoba y
dejando reluciente todo el suelo del local nuevo.
A
Mabel a María Teresa y a Charo, en labores de colocar, ordenar y
limpiar lo que todos los demás habíamos descolocado.
A
Mariluz, a vueltas con las cajas aunque estas no fueran
registradoras.
A
Mary, distribuyendo juego en el nuevo local con los paquetes,
enseres y utensilios
A
Paula y asu madre (perdón, no sé su nombre) y a Ángeles de
Afaor, difundiendo la cultura -libros- de un local a otro con sus
coches.
A
Vicente y a Fernando, dos amigos que no fallaron, dejando
compromisos que tenían el fin de semana por echarnos una mano y su
fuerza y pericia para mover las cosas.
A
Laura y a Marcos y a Guzmán y posiblemente otros más que no
recuerdo y a los que pido perdón por el olvido.
Y
a los siguientes.¡¡¡ Ah, los siguientes!!! a los os siguientes
los he dejado para el final; en algún lugar he leído que “los
últimos serán los primeros” y quiero que se cumpla con ellos.
A
Ana, a Dani, a Eva, a Felipe, a Iria, a José, a Lucía, a Manuel, a
Mateo, a Mauro, a Nuria, a Paz, a Pedro, a Sara P., a Sara R. y a
Uxía que semejaban bailar transportando las cosas, brazos en alto,
hacia el furgón, acarreando lo que unos desmontaban o descolgaban de
las paredes, funcionando como en una danza con giros y remolinos con
rodillas en el suelo todos pendientes de uno y uno sin perder de
vista a todos los demás.
Estos
nombres son una parte de los alumnos de Queixumes; son los más
veteranos, los más grandes y que junto con los que están en niveles
elementales, y sin embargo en la misma medida, TODOS, repito: TODOS
son los que sacan para adelante las actuaciones, los espectáculos,
los pasacalles, los viajes, los compromisos de última hora. Son el
alma máter de la Asociación, sin ellos esto no sería lo que es y
tampoco cómo es. Y muchos de los que antes he nombrado no haríamos
lo que estamos haciendo.
Volvieron
a demostrar lo que son, en esta ocasión, sacando para adelante un
traslado que sin ellos hubiera sido imposible hacerlo en tan poco
tiempo.
A
todos: GRACIAS
Con
gente como vosotros se pueden emprender muchas cosas y con vuestra
ayuda Queixumes acaba de comenzar una nueva etapa en su historia.
Gracias a todos y a cada uno de vosotros por vuestro loable trabajo
en el traslado a la nueva sede de Queixumes
Bueno,
como que uno se siente orgulloso de tener un equipo así.
¡¡¡¡¡GRACIAS
EQUIPO !!!!!
