sábado, 7 de octubre de 2017

DE OSCURO, CLARO




De oscuro. Eran aquellas tardes ilusionantes cuando en Queixumes  preparábamos  el festival internacional  y los festivales juveniles.  Hubo un tiempo en el que Queixumes organizaba festivales folclóricos, juntándose en Ourense durante una semana jóvenes de media Europa y grupos de toda Galicia y parte de España. Fueron cinco internacionales y trece juveniles a nivel nacional.



De oscuro, con no sé si un fular o una   bufanda al cuello y un sombrero;   me llamó la atención aquel atuendo para una persona de su oficio, los imaginaba encorsetados en trajes  grises de raya diplomática, el traje que según cuentan los entendidos es el traje por excelencia para firmar y hacer negocios. Pero me gustó aquella afabilidad posiblemente estudiada, que sin embargo hacía más accesible el trato y  más amistosa la reunión.  Esperaba un empecinado vendedor estilo “de aquí no salgo sin vender lo que sea” y me encontré con una persona  que amaba su oficio, y se notaba.



De oscuro,  con no sé si un fular o una   bufanda al cuello y un sombrero y una carpeta y comenzó a ejercer su trabajo: Mupis que se ven muy bien,  buzoneo masivo por la zona,  flyers, car mailing, opis, dípticos, trípticos,  lonas, pancartas, afiches… yo no entendía nada  aunque asentía con la cabeza a cada explicación que daba, en un momento la mesa se convirtió en un expositor de formatos publicitarios.    Me parecía ver ya  la publicidad del festival por todos los sitios: escaparates, buzones, parabrisas de los coches, manteles publicitarios en todas las mesas de todos los bares.  Nos vendió ilusión, tan necesaria siempre. El trabajo nos  era desagradecido,  no nos  daba el fruto que le pedíamos, algo no sabíamos hacer o lo hacíamos mal. Hubo que recurrir a profesionales.




De oscuro,  con no sé si un fular o una   bufanda al cuello y un sombrero y un una carpeta. Asi fue como empezamos. Poco a poco fue convirtiéndose en nuestra empresa de publicidad y ya no hay actividad, actuación o proyecto de Queixumes que no lleve el sello de Orixe Publicidade Comunicación la empresa de  Publicidad que él dirige, y su equipo también asiduos colaboradores con Queixumes.  Así  que donde veáis el logo de Queixumes dad por bueno  que es obra de esta magnífica gente.  Muchas han sido las colaboraciones desde entonces, surgiendo  una especie de simbiosis, Queixumes le ofreció  un espacio y una entidad que él no disponía y él puso a nuestra disposición en mundo de la publicidad.
De oscuro,  con no sé si un fular o una   bufanda al cuello y un sombrero y un una carpeta. Sonriente y amable siempre  y que nunca perdona un, educado entonces y ahora amistoso,  apretón de manos.


 Claro, en esos momentos de asueto  cuando lo más importante es despejar la mente y te encuentras un escrito que es corto y  comienzas a leer. La primera frase te llama la atención. El cuadro  que  dibujan las  palabras comienza a  interesarte porque lo pintan de otra manera aunque sea lo mismo lo que se cuente. La historia es como muchas, pero distinta porque lleva impreso el sello del sentimiento. Reflexionas sobre lo que lees, a veces imaginas, recuerdas y meditas.


Claro en sus  “Reflexiones Buenistas”, permitidme  que resuma  en dos palabras sus inquietudes  ético morales,  en las que el  raciocinio directo, a  veces, choca con la sinrazón de los hombres  en dura  lucha incruenta,  sucumbiendo la razón a la realidad no sin dejar un resquicio de esperanza, siempre necesario ante cualquier adversidad.

Claro en sus  “Reflexiones Buenistas”, en sus “Escribo para Ella”. Nunca olvidaré aquella manos  explorando  terrenos prohibidos en una contienda de caricias, abrazos y besos. Nunca le perdonaré que no le diera un final a aquel relato. “Hay veces que la imaginación tiene que ser la protagonista”  –me dijo–  y me puse a imaginar.  Os aconsejo lo mismo.


Claro en sus  “Reflexiones Buenistas”,  en sus “Escribo para Ella”,  en sus entrañables “Andrómenas e outros Contos”La primera que cayó en mis manos me recordó  el poema de “El Embargo”  de Gabriel  Galán y  no por el contenido  sino por esa imagen del recuerdo que no quieres que se pierda que uno, Galán, lo centró en una cama y él lo centra en la comarca de su amado río Asneiro, protagonista principal  del jardín de su recuerdos, ese jardín que todos tenemos  y que  nadie puede arrebatarnos. Andrómenas que narran historias de un  tiempo cruel henchido de sinsabores que un niño vive arropado y acariñado por su padre.



Claro en sus  “Reflexiones Buenistas”,  en sus “Escribo para Ella”,  en sus entrañables “Andrómenas e outros Contos”. Ventanas abiertas a la reflexión, a la  imaginación, a los recuerdos, a la meditación a través de  unos relatos que la mamo escribe y   el corazón dicta.
De oscuro, claro. ¿Está  claro?


A mi amigo Avelino Jácome, del cual aprendo aunque el piensa que le corrijo. 

Ayer, 6 de Octubte de 2017 Queixumes dos Pinos quiso agradecerle los muchos años compartidos en el campo del folclore y de la cultura en general  rindiéndole un pequeño homenaje.